Sí, ese duelo entre Perú y Bolivia no estaba en los planes de
nadie, porque esos lugares debieron tomarlos Uruguay o Colombia, quienes
contra cualquier expectativa previa quedaron terceros en sus
respectivos grupos. Pues bien, eso no sucedió y ahora uruguayos y
colombianos deberán batallar ante contrarios mucho más exigentes, y
quizás despedirse de la cita continental más temprano de lo previsto.
Uruguay contra Chile, que además de ser el anfitrión, ha sido el conjunto que mejor cara ha mostrado en la justa, con balance en todas sus líneas y química total entre sus integrantes, una química que no pudo enrarecer ni siquiera el sonado escándalo del accidente de Arturo Vidal en estado de ebriedad. Jorge Sampaoli ha logrado colocarse por encima de todo eso, y lo más importante, salvar al grupo de cualquier efecto nocivo.
Pero si de grupo se trata, Uruguay no era menos, porque es un plantel cuya base lleva junta bastante tiempo. Les ha faltado poder en la delantera, lógico si no pueden apelar a su principal carta, Luis Suárez. No obstante, Diego Rolan y Edinson Cavani poseen la calidad necesaria como para desequilibrar a cualquier defensa, y tratarán de hacerlo ante los dueños de casa. Algo similar les tocó en la pasada Copa al chocar con Argentina en esta misma instancia, y no pararon hasta coronarse. Pero aquello fue otra historia.
Argentina y Colombia proponen un verdadero choque de trenes. Ninguno de los dos planteles ha mostrado en suelo chileno su verdadero potencial, pero seguramente quien salga triunfador en este duelo resultará notablemente fortalecido de cara a las instancias siguientes. Lionel Messi y James Rodríguez necesitan ya mostrarse para poder empujar a sus conjuntos. Lo ideal sería que ambos regalaran su gran calidad a la vez, y que gane quien mejor lo haga.
Entre Brasil y Paraguay el favoritismo es lógico a favor de los auriverdes, pero ya fueron sorprendidos por los colombianos. Los paraguayos no cuentan con tanta alcurnia, pero son un once bien difícil de derrotar, y este Brasil, incluso con Neymar, deja demasiadas dudas. De todas maneras, me inclino por el peso de la camiseta, que sale a relucir casi siempre en los momentos cruciales.
Por último, entre bolivianos y peruanos creo que estos últimos tienen más fútbol, pero se trata de un duelo muy parejo. De cualquier manera, quien salga airoso en ese desafío, no creo que avance mucho más, pero ya llegar a semifinales sería un tremendo resultado para ambos.
Uruguay contra Chile, que además de ser el anfitrión, ha sido el conjunto que mejor cara ha mostrado en la justa, con balance en todas sus líneas y química total entre sus integrantes, una química que no pudo enrarecer ni siquiera el sonado escándalo del accidente de Arturo Vidal en estado de ebriedad. Jorge Sampaoli ha logrado colocarse por encima de todo eso, y lo más importante, salvar al grupo de cualquier efecto nocivo.
Pero si de grupo se trata, Uruguay no era menos, porque es un plantel cuya base lleva junta bastante tiempo. Les ha faltado poder en la delantera, lógico si no pueden apelar a su principal carta, Luis Suárez. No obstante, Diego Rolan y Edinson Cavani poseen la calidad necesaria como para desequilibrar a cualquier defensa, y tratarán de hacerlo ante los dueños de casa. Algo similar les tocó en la pasada Copa al chocar con Argentina en esta misma instancia, y no pararon hasta coronarse. Pero aquello fue otra historia.
Argentina y Colombia proponen un verdadero choque de trenes. Ninguno de los dos planteles ha mostrado en suelo chileno su verdadero potencial, pero seguramente quien salga triunfador en este duelo resultará notablemente fortalecido de cara a las instancias siguientes. Lionel Messi y James Rodríguez necesitan ya mostrarse para poder empujar a sus conjuntos. Lo ideal sería que ambos regalaran su gran calidad a la vez, y que gane quien mejor lo haga.
Entre Brasil y Paraguay el favoritismo es lógico a favor de los auriverdes, pero ya fueron sorprendidos por los colombianos. Los paraguayos no cuentan con tanta alcurnia, pero son un once bien difícil de derrotar, y este Brasil, incluso con Neymar, deja demasiadas dudas. De todas maneras, me inclino por el peso de la camiseta, que sale a relucir casi siempre en los momentos cruciales.
Por último, entre bolivianos y peruanos creo que estos últimos tienen más fútbol, pero se trata de un duelo muy parejo. De cualquier manera, quien salga airoso en ese desafío, no creo que avance mucho más, pero ya llegar a semifinales sería un tremendo resultado para ambos.
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