¡Se puso
caliente la Liga
española! Ahora solamente un punto separa al Real Madrid de los punteros desde
el pistoletazo de salida: Barcelona y Atlético de Madrid, enfrascados en un
pulso que pocos pensaron duraría tanto.
Con
apenas un partido de la segunda vuelta jugada ha retomado la vida esta
competición, en la cual 17 equipos tienen disímiles metas, pero solamente tres
sueñan en serio con el título.
Por eso
se hacía necesario que los tres estuvieran más pegados, para mantener el sabor
de la competencia, los dientes apretados del minuto uno hasta el 90, la emoción
del aficionado pendiente de la televisión, la radio o los medios digitales,
tras el resultado, no solamente de su equipo, sino también de los otros dos.
Si bien
Barcelona y Atlético han mantenido un nivel parejo a largo de toda la campaña,
el Real sufrió altibajos, y no es hasta ahora que logra vencer y convencer en
más de una fecha consecutiva.
A lo
mejor ya Carlo Ancelotti encontró la llave, la alquimia perfecta para mezclar a
los Bale, Cristiano, Di María y Benzema al ataque, y la solidez requerida de
los Pepe, Sergio Ramos y compañía para poder aspirar en serio a la corona.
El
regreso a gran altura de Xabi Alonso está sin lugar a dudas entre las mejores
noticias llegadas a la casa merengue, porque se trata del jugador que aporta el
equilibrio necesario al plantel, capaz de elaborar una vistosa jugada de ataque
y al minuto siguiente cortar una ofensiva contraria. Con él en forma, este Real
Madrid se vuelve mucho más temerario.
Por el
contrario, en el Barcelona Tata Martino parece todavía buscar su esquema,
enredado por las lesiones de Messi y Neymar, y ahora a la espera de las
consecuencias del escándalo desatado por el costoso fichaje del brasileño,
superior al de Bale en las filas madridistas.
En tanto,
el Atlético ha hecho mucho más de lo esperado. Diego Simeone ha sabido sacarle
todo el jugo posible a una plantilla que no luce para tanto, aunque con el
regreso de la Liga
de Campeones sus jugadores, con muy poco margen de reemplazo, pudieran sentirse
el agotamiento físico de jugar tres competiciones a la vez.
La lucha
está completamente abierta ahora, y con los clásicos por venir, todo se torna
mucho más emocionante. Acomódense en sus asientos, que la fiesta entra en su
mejor momento.
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