jueves, 16 de febrero de 2012

Minguzzi y el anhelo de repetir el oro olímpico

Por Lemay Padrón Oliveros

Para el luchador italiano Andrea Minguzzi repetir el oro olímpico alcanzado en Beijing-2008 es su más caro anhelo, como declaró hoy en esta capital.
He estado alejado de las grandes competencias en estos años por lesiones, en 2009 me operé del codo izquierdo y en 2010 de la rodilla derecha, pero me siento confiado para alcanzar la clasificación y defender el título, declaró.
Minguzzi fue el monarca más sorprendente de su deporte en la lid estival china, al dominar la división de 84 kilogramos del estilo greco sin llegar con el aval de una medalla mundial.
Allí fue protagonista de una polémica pelea con el sueco Ara Abrahamian, el gran favorito, a quien eliminó en semifinales, pero el escandinavo estuvo en desacuerdo con el fallo arbitral y botó la medalla de bronce ganada luego.
Sin embargo, el italiano ratificó en la final su excelente forma y se llevó el oro, aunque según confiesa, eso no le cambió mucho la vida pese a ser apenas el tercer gladiador monarca de su país en la historia de estas lides.
En Italia el deporte es el fútbol, lo otro está muy por debajo. La lucha no tiene un gran patrocinio y aunque me aumentaron el estipendio no puedo decir que haya sido un cambio notable, indicó.
Tras retornar a los Mundiales, Minguzzi alcanzó un meritorio octavo puesto en la versión de Estambul-2011, que lo dejó a las puertas de la clasificación olímpica, accesible para los seis primeros.
Estuve a un triunfo de lograr el pase, por eso creo que lo alcanzaré en estos meses, dijo.
Sobre Cuba, explicó que es la sexta ocasión que la visita, aunque previamente solamente compitió en el año 2002, siendo todavía juvenil, y fue quinto ese año en el torneo Granma.
Este año se alzó con el bronce en este certamen, tras caer en su debut contra el anfitrión Pablo Shorey, doble medallista del mundo, 0-1 y 1-3.
Todavía estoy tomando la forma deportiva y diría que estoy al 70 por ciento aproximadamente; Shorey es un gran oponente y me sorprendió muy rápido en el combate, eso influyó en la derrota, señaló.
No obstante, Minguzzi sacó importantes experiencias y eso le servirá para acercarse a su gran sueño: convertirse en el único luchador italiano con dos títulos olímpicos.

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