sábado, 30 de julio de 2011

Llegó la hora para Winnipeg

Por Lemay Padrón Oliveros

Tres intentos debió hacer la ciudad canadiense de Winnipeg para albergar unos Juegos Panamericanos. Primero fue para la cita de 1959, que no pudo obtener por delante de Chicago, reemplazante de última hora por Cleveland, y luego perdió frente a Sao Paulo la sede para 1963.
No obstante, la capital de la provincia canadiense de Manitoba finalmente se llevó el gato al agua para la cita continental de 1967, y más de 30 años después volvería a organizarla en 1999, pero esa es otra historia.
Del 23 de julio al 6 de agosto de 1967 se reunieron en Winnipeg dos mil 418 atletas de 29 países, los cuales compitieron en 21 deportes, entre ellos el debut del judo y el hockey sobre césped masculino, además de que la natación creció en más de 10 modalidades.
Entre las principales novedades de estos V Juegos estuvo la pista de atletismo, construida de un material sintético, denominado Tartán, toda una novedad para la época.
Además, las pruebas atléticas y de natación contaron con cronometraje electrónico en centésimas, incluido el todavía utilizado foto finish.
La cita se distinguió también por la participación de las mujeres en los papeles de árbitros y funcionarias, además de la cifra de unos nueve mil voluntarios, la más elevada hasta ese momento, mientras que como países debutaron Belice y Bolivia.
El medallero general ratificó a Estados Unidos como la principal potencia del continente, al conquistar 128 títulos, 69 subtítulos y 47 terceros puestos, seguido por Canadá (17-39-50), Brasil (11-10-5), Argentina (8-14-12), México (7-16-25) y Cuba (7-16-24).
La Perla del Caribe debería esperar otros cuatro años para convertirse en la segunda potencia de la región.

PILAR ROLDÁN, MARK SPITZ, Y COMPAÑÍA

Primera medallista olímpica latinoamericana.
Entre las estrellas de los Juegos estuvo la esgrimista mexicana Pilar Roldán, quien ganó el florete cómodamente, como antesala de lo que sería su plata olímpica en México-1968, primera para una mujer de su país y de América Latina en citas bajo los cinco aros.
Roldán llegaba con el aval de haber ganado su especialidad en Chicago-1959, y varias lides importantes en los circuitos de Europa, además de poseer la experiencia de participar en las Olimpiadas de Melbourne-1956 y Roma-1960.
Esta esgrimista de padres tenistas ganó el certamen continental canadiense con cuatro triunfos y una derrota, y se mantuvo activa casi hasta los 50 años, pues en 1988 se impuso en torneos regionales en su país natal y en Brasil.
No obstante, el máximo ganador de los Juegos fue el nadador estadounidense Mark Spitz, al llevarse cinco preseas doradas. Spitz, quien hasta Beijing-2008 poseyó el récord de más títulos conseguidos en unos Juegos Olímpicos, dominó aquí las pruebas de 100 y 200 metros mariposa, ambas con récord mundial, junto a las postas 4x100 libre; 4x200 libre, y 4x100 combinado.
Tenía solamente 17 años y se llenó de ínfulas, por lo que predijo que ganaría seis oros estivales en México-1968, cuando solamente ganó dos, pero en Munich-1972 sí rompió todos los pronósticos al conquistar siete primeros puestos, todos con plusmarcas planetarias.
Entre las damas otra norteña de 17 abriles fue la máxima ganadora, Claudia Kolb, quien dominó las especialidades de 200 mariposa, 200 y 400 combinado y la posta 4x100 combinada, con récords mundiales en las tres últimas pruebas.
En total, en las piscinas se impusieron 14 registros del orbe y 28 panamericanos (15 masculinos y 13 femeninos), y Estados Unidos se agenció 24 de las 29 modalidades entre los dos sexos.
El pechista brasileño José Silvio Filho rompió el predominio norteño al dominar los 100 y 200 de su modalidad, y los restantes tronos quedaron en poder de la nación sede.
Sobre las pistas se destacó el velocista estadounidense Lee Evans, quien igualó la cota planetaria en 400 metros (44.9 segundos), que rompió al año siguiente en México-1968 (43.86), marca vigente por cerca de 20 años. En Winnipeg compitieron varios de los norteamericanos estrellas estivales del año siguiente: Wyomia Tyus, John Carlos, Earol McCulloug y Willie Davenport, entre otros, además del sorprendente Bob Beamon, quien una vez más fue superado por el más técnico Ralph Boston.
Cuba fue el único país latinoamericano capaz de ganar oro en este deporte, gracias a la balista Irene Martínez y la posta 4x100 femenina, integrada por Miguelina Cobián, Marcia Garbey, Violeta Quesada y Cristina Echavarría.
La mayor de las Antillas comenzó aquí también su predominio en el boxeo, al imponerse en tres de las 10 finales, de las cuales siete quedaron en púgiles de Latinoamérica y el Caribe.
Enrique Regüeiferos (60 kilogramos), Andrés Molina (67) y Rolando Garbey (71) pusieron los oros de Cuba, Miguel García (57) y Jorge Víctor Ahumada (75) triunfaron por Argentina, Francisco "Morochito" Rodríguez (51) por Venezuela, y Juvencio Martínez (57) por México.
El velódromo tuvo una estrella naciente en el venezolano Martín Emilio "Cochise" Rodríguez, ganador de los cuatro mil metros persecución individual, especialidad que lo convertiría en campeón y recordman mundial, además de titular olímpico.
Por su parte, el tenis dejó al brasileño Thomas Koch como máximo ganador, al imponerse en singles y en el doble masculino, y su país brilló también en las competiciones de vela.
En tanto, el levantamiento de pesas siguió en poder de la nación de las barras y las estrellas, cuya barrida fue evitada por el puertorriqueño Fernando Báez (56 kg) y el cubano Pastor Rodríguez (67).
Asimismo, la pista de remo puso en la palestra pública al futuro medallista olímpico argentino Alberto Demiddi, quien obtuvo el oro con el bote un par de remos cortos, como presagio de sus dos coronaciones cuatro años más tarde en Cali-1971, cuando también estuvo en el ocho con timonel.
Argentina ganó en el debut del hockey, con una histórica final ante Trinidad y Tobago, que nunca más ha regresado al podio.
En los otras modalidades colectivas, México se llevó el fútbol, Brasil el baloncesto femenino y Estados Unidos las restantes, incluyendo el béisbol en un play off final ante Cuba, que había dominado la fase clasificatoria.
Argentina encabezó el ciclismo, y los estadounidenses primaron en esgrima, judo, pesas, gimnasia, remo, tiro, tenis, clavados y lucha, estos dos últimos deportes sin ceder coronas.

miércoles, 27 de julio de 2011

Yao Ming, más allá del baloncesto

Por Lemay Padrón Oliveros

La ciudad china de Shangai se estremeció esta semana, y no por la celebración del Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos, sino porque su hijo más querido decía adiós, el baloncestista Yao Ming, el deportista más mediático de todo el país.
Lucía enorme delante de Van Gundy.
Con apenas 30 años, el pívot de 2.26 metros de altura anunció el fin de su carrera deportiva, plagada de lesiones en las últimas temporadas con los Houston Rockets de la Liga profesional estadounidense de baloncesto (NBA).
Fue el cuarto jugador más alto en la historia del torneo norteño, solamente superado por el rumano Gheorghe Mureşan (2.36 metros) y el sudanés Manute Bol (2.32), ambos fuera de la Liga cuando entró el asiático en 2002.
En sus ocho años en la NBA llegó a promediar 19 puntos y nueve rebotes por encuentro, y su mejor campaña en el orden individual fue la de 2006-2007, pero la más disfrutada la de 2008-2009, cuando gracias a su aporte los Rockets llegaron a las semifinales de Conferencia y cayeron en siete partidos con los campeones Lakers.
Además, fue incluido ocho veces en el equipo Todos Estrellas de la NBA, principalmente por mérito propio, pero también por los votos de los millones de chinos que lo apoyaban y lo pusieron incluso como regular por delante de Shaquille O´Neal.
Pero más allá del baloncesto, el legado de Yao Ming sobrepasa el deporte, porque su presencia el la Liga estadounidense fue todo un símbolo y, vale decirlo también, un gran negocio para la NBA, pues era considerado el rostro de China para Occidente.
Tanto es así que se especula que con su partida el mercado asiático, evaluado en dos mil 300 millones de dólares anuales, podría reducirse a más de la mitad, ya que el grueso venía de la nación de la Ciudad Prohibida.
Actualmente China es el mercado más grande para la NBA fuera de Estados Unidos, con un aproximado de 30 millones de espectadores cada semana, y la popularidad de este deporte es evidente entre las redes sociales, pues en Sina Weibo, la NBA cuenta con 4.35 millones de seguidores, casi el doble de los seguidores que tiene en Twitter.
Pero Yao Ming era la parte central de la atracción por la NBA en China, y por el momento, parece que no hay un heredero al trono del básquetbol chino.
Por otra parte, Ming estuvo durante toda su carrera en Estados Unidos ligado a causas benéficas, como cuando por el terremoto de Sichuan de 2008 donó dos millones de dólares para trabajos de rescate y creó una fundación para ayudar a reconstruir las escuelas destruidas por el sismo; todo eso lo hace irremplazable en estos momentos.

LAS LESIONES ACABARON CON SU CARRERA

Su prometedora carrera no pudo ser más grande por las numerosas lesiones que sufrió, en los pies, piernas, tobillos, brazos y hasta las manos, con mayor o menor gravedad.
Sin embargo, nunca renunció a jugar con su selección nacional, cuyos colores defendió en Mundiales juveniles, varios campeonatos asiáticos, dos Mundiales absolutos y los Juegos Olímpicos de Sydney-2000, Atenas-2004 y Beijing-2008.
Salvo en los certámenes regionales, en todos los demás el combinado chino quedaba siempre entre los últimos lugares, pero eso nunca desanimó a Ming, quien debía echarse al equipo completamente sobre sus hombros.
En definitiva, debió decir adiós a causa de los problemas físicos, pues apenas jugó cinco partidos en las últimas dos temporadas, aunque se mostró contento de haber dejado el deporte por su propia decisión.
Creo que simplemente no quería terminar mi carrera en una silla de ruedas, pero seguiré vinculado al baloncesto con los Shanghai Sharks, indicó en la conferencia de prensa organizada en su ciudad natal para anunciar el doloroso retiro.

lunes, 25 de julio de 2011

Definitivamente Dios no es paraguayo

Por Lemay Padrón Oliveros

Tenía mis dudas hasta el minuto 11 de la final de la Copa América de fútbol, pero de ahí en adelante me convencí de una vez por todas: Dios no es paraguayo.
Al técnico Gerardo “Tata” Martino le deben haber sentado tan mal las remontadas de los dos últimos partidos de la fase preliminar, las cuales echaron por la borda dos potenciales victorias de Paraguay, que parece haber indicado una sola cosa a sus pupilos desde entonces: defender, defender y defender.
Desde que pusieron un pie en cuartos de final, los guaraníes se acercaron muy esporádicamente al área de sus rivales, y en varias ocasiones se salvaron milagrosamente de encajar goles, hasta convertirse en el único equipo de la historia capaz de llegar a una final sin ganar un encuentro.
Llegué a pensar que Dios había nacido en la tierra de Augusto Roa Bastos o que al panteón celestial le faltaba una figura: San Justo Villar, sin dudas el mejor cancerbero del certamen. Hubiera sido demasiado que se llevaran el título.
Uruguay se encargó de ponerlos nuevamente sobre la tierra, de la mano de sus dos jugadores más talentosos: Diego Forlán y Luis Suárez (me quedé con ganas de ver más a Edinson Cavani).
Viendo la final me volvió a picar el incendiario que llevo dentro, y resurgió mi inconformidad con la designación del venezolano Tomás Rincón como mejor jugador de la Copa, una designación dejada a criterio de los internautas.
De Venezuela he hablado con anterioridad, y si hubiera existido un premio colectivo sin dudas se lo hubiera dado a la Vinotinto, pero creo que el galardón individual debimos entregárselo a “Cachabacha”, Suárez o al peruano Paolo Guerrero. El capitán charrúa no marcó hasta el choque por el título, pero todos los balones de peligro de su equipo salieron de sus botines durante todo el torneo.
En fin, acabamos de despedir una Copa América no hecha para el glamour, donde las grandes figuras, salvo el propio Forlán, quedaron por debajo de las expectativas.
Brasil y Argentina a pasar raya y prepararse mejor, porque talento les sobra. El espectáculo les echa de menos.

PD: Que me perdonen los creyentes. La referencia a Dios era solamente un recurso periodístico, en ningún modo una ofensa a religión alguna.
PD2: La Conmebol designó a Luis Suárez como mejor jugador de la Copa, Rincón se quedó con el premio Adidas de los internautas.

domingo, 24 de julio de 2011

La Copa de los de abajo

Por Lemay Padrón Oliveros

Independientemente de lo que suceda en el partido final entre Uruguay y Paraguay, la Copa América Argentina-2011 ha dejado un sabor dulcísimo a los de abajo, en este caso Perú y Venezuela, dos países condenados al sótano de la región.
En el caso de los peruanos, tuvieron un período de oro en la década del 70, cuando Teófilo Cubillas lideraba a su mejor generación, pero para Venezuela jamás había existido un momento como este.
Por eso pese a caer 1-4 con los peruanos en el partido por el bronce, pocas veces jugado con tanta entrega por ambos bandos, para la Vinotinto esta Copa es casi todo ganancia, porque han elevado su autoestima y merecido mayor respeto de los rivales, hasta hace poco seguros de llevarse los tres puntos ante ellos en cualquier torneo.
Los de la tierra de Bolívar no quedaron más arriba en buena medida por la poca cabeza del volante Tomás Rincón, quien se hizo expulsar tontamente en el tope de cuartos de final contra Chile, cuando se jugaban los últimos compases del partido y en una bola totalmente inofensiva, y contra Perú hizo algo similar, pero apenas iniciado el segundo tiempo, por lo cual hizo a los suyos desgastarse durante casi 40 minutos con un hombre menos.
Aunque probablemente tampoco sin él su equipo hubiera podido llegar adonde llegó, solamente los votos de los internautas venezolanos justifica que haya sido seleccionado el jugador más destacado de la Copa.
Así y todo, el coraje de los bolivarianos se demostró una vez más cuando Juan Arango logró el descuento, aunque al final las piernas no les dieron para revertir el marcador.
Perú es un caso similar, pues su portero Raúl Fernández se lanzó por gusto en pos de una pelota en la semifinal contra Uruguay y le dejó el balón servido a Luis Suárez, que no lo perdonó. Con ventaja los uruguayos se vuelven algo menos que invencibles.
Tanto el veterano Sergio Markarián como el joven César Farías dieron muestras de conocimiento de sus jugadores al alinear en cada momento a quien estuviera mejor y encajara en el estilo del rival, con sus constantes cambios en la delantera.
Solamente me quedó la insatisfacción de no ver a Yohandry Orozco entrar como sustito para destrabar el partido con Paraguay en lugar de Giancarlo Maldonado, pero nadie sabe lo que hubiera podido ocurrir y la inclusión de Maldonado no era nada descabellada.

viernes, 22 de julio de 2011

Gracias Venezuela, fue lindo mientras duró

Por Lemay Padrón Oliveros

La felicidad no es eterna y de todos los sueños se despierta. Estas verdades de Perogrullo las constaté (una vez más) con la eliminación de Venezuela en las semifinales de la Copa América de fútbol.
Y nótese que hablo de eliminación, no de derrota, porque caer en tiros de penal ante un equipo como Paraguay, asentado en Suramérica luego de no perderse una Copa Mundial desde 1998 y amplio dominador de las eliminatorias más recientes, no puede considerarse un fracaso.
Menos aún cuando los postes fueron los principales responsables de que la Vinotinto no discutiera el título, cuando muchos esperaban que fuera mayoreada por el once paraguayo.
Desgraciadamente la ciudad de Mendoza, la tierra de los mejores vinos de Argentina, no quiso que le disputaran esa gloria y dejó claro que para licores, los producidos allí.
Este excelente resultado del fútbol venezolano para nada es un espejismo, sino la continuidad de un serio trabajo iniciado desde las eliminatorias para el Mundial de Surcorea/Japón-2002, cuando el técnico era el fallecido argentino José Omar “Pato” Pastoriza.
Luego llegó el profesor Richard Páez y la Vinotinto siguió creciendo en personalidad, amor propio y respeto en el área suramericana. Desafortunadamente ese proceso terminó en 2007, y no del todo bien, quizás por la persistencia de Páez de alinear a su hijo, si nos quedamos en la epidermis.
Cualquiera haya sido la razón, el trabajo de Páez fue SUPERMERITORIO, pero más todavía lo fue la posición asumida por la Federación venezolana, que lejos de sentirse ofendida o ultrajada, siguió los pasos del entrenador saliente y colocó a otro capaz de continuar su senda.
Lo que le pueda faltar al ecuánime César Farías en experiencia (asumió con apenas 34 años en 2008) le sobra en humildad para recoger el fruto sembrado por otro y no pretender descubrir el agua tibia; un mal muy extendido por estas tierras, de pasado caudillista.
Futbolistas venezolanos, POR FAVOR, créanse lo que han logrado y las potenciales que poseen para crecer mucho más. Gracias por recordarnos que las utopías no se entregan.

jueves, 21 de julio de 2011

María Caridad Colón, reina de América

Por Lemay Padrón Oliveros

Solamente tres jabalinistas han podido ganar más de una vez en Juegos Panamericanos, y una de ellas es la cubana María Caridad Colón Ruenes, quien tuvo la posibilidad de alcanzar hasta cuatro medallas en este tipo de lides.
Cuando hacía sus pininos en su natal Baracoa, la primera Villa fundada por los colonialistas españoles en Cuba, mostró rápidamente sus condiciones para practicar deportes, especialmente los de lanzamiento, pese a no contar con un físico ideal para esta modalidad.
El tenis de mesa le robó un poco de tiempo en su niñez, pero se decantó definitivamente por la jabalina, y con ella obtuvo en 1974 su primera medalla: plata en los Juegos Deportivos Nacionales Escolares.
Así y todo algunos intentaron frenarla por el famoso esquema del somatotipo, y le aconsejaban un regreso al tenis de mesa o mudarse al ajedrez, pero el empeño de la chica fue superior, y poco a poco el tiempo le dio la razón.
Su primer gran triunfo llega en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Medellín-1978, cuando rompe el récord del área con un registro de 63 metros y 40 centímetros. Hasta ese momento había logrado en par de ocasiones la mejor marca mundial juvenil.
Un año después, durante los Juegos Panamericanos de San Juan, Puerto Rico, también hizo trizas la supremacía continental con un envío de 62.30 metros, con el cual se llevó la medalla de oro tras sacarle casi seis metros de ventaja a la ocupante del segundo puesto.
Sus siguientes Panamericanos, los de Caracas-1983, los enfrentó luego de haberse convertido en madre.
La cita venezolana la vio enviar el dardo hasta los 63 metros con 76 centímetros, suficientes para desplazar a su compatriota Mayra Vila (63.32) y a la anfitriona Marieta Riera (53.60).
Cuatro años más tarde mereció la presea de plata en Indianápolis-1987, al concluir con disparo de 61.66, por detrás de su colega Ivonne Leal, quien consiguió 63.70.
Quiso despedirse ante su afición en los Juegos de La Habana-1991 y tenía marcas como para incluirse en el equipo, pero los responsables de la elección no la escogieron, en lo que considera el momento más duro de su carrera.
Así perdió la posibilidad de lograr cuatro metales en Panamericanos, pues las ocupantes de los puestos dos y tres cerraron en la justa habanera con envíos por debajo de los 60 metros, una marca que siempre superó en las grandes competencias.
La única jabalinista que ha logrado tal permanencia en el podio continental es la bahamesa Laverne Eve, quien mereció dos subtítulos y dos terceros puestos, pero ningún oro, entre 1995 y 2007.

LA GLORIA OLÍMPICA

Sin embargo, el 25 de julio de 1980 es el día más importante en la trayectoria deportiva de María Caridad Colón, porque ese día entró en la historia del deporte mundial al convertirse en la primera mujer de Iberoamérica en coronarse en unos Juegos Olímpicos.
Con apenas 22 años muchos se sorprenden cuando en lo más alto del podio se coloca esta esbelta mulata, que enloqueció a medio mundo con sus encantos físicos, más allá de sus innatas dotes para el lanzamiento de la jabalina.
Pese a llegar con el trono panamericano de San Juan-1979, una persistente lesión en su espalda pretendió interponerse en su mayor sueño. No obstante, la Colón sigue al pie de la letra las indicaciones de los médicos: !Suéltalo todo en el primer intento!, le aconsejaron.
Y así mismo fue, en el estadio Lenin de Moscú la chica color chocolate claro tomó impulso y le puso todo el amor del mundo, toda la pasión y todo el sacrificio de años de entrenamiento en un solo disparo.
Varios segundos duró la espera, pero al final los jueces decretaron: 68.40 metros, nueva cota estival.
La marca era tan respetable que ninguna de las restantes finalistas, incluidas la alemana democrática Ruth Fuchs, titular de Munich-1972 y Montreal-1976 , y la soviética Tatiana Biryulina, vigente recordista del orbe, pudieron sobreponerse al golpe de efecto.
Llegó el último intento de sus contrarias y la guantanamera no pudo frenar su alegría: saltos, lágrimas y muchas sonrisas llenaron el principal escenario deportivo de esos Juegos.
Por primera vez una mujer de Iberoamérica subía a lo más alto del podio en ese tipo de lides, coincidentemente en el llamado Año Internacional de la Mujer.
Durante la conferencia de prensa no olvida la fecha en la cual consiguió su coronación: vísperas del 26 de julio, una fecha histórica para Cuba, cuando el asalto al cuartel Moncada marcó el inicio de la lucha armada que concluiría con el triunfo de la Revolución.
El ejemplo de la Colón no se quedó en sus hazañas personales, sino que sirvió de acicate para otra grande de la disciplina, Osleidis Menéndez, quien repitió su hito en Atenas-2004 y le agregó el perfume de un récord mundial.
Para más coincidencia, Menéndez, la otra doble monarca panamericana junto a la chilena Marlene Ahrens, también obtuvo su corona estival con su primer envío. Cosas que tiene la vida.
Tras su retiro del deporte activo, María Caridad Colón impartió clases en el Instituto Superior de Cultura Física Comandante Manuel Fajardo de la capital cubana, y actualmente se desempeña como funcionaria del Instituto Cubano de Deportes, en el área de Recreación.

miércoles, 20 de julio de 2011

Superamos el desafío

Por Lemay Padrón Oliveros

Sin ánimo alguno de ser triunfalista, Cuba acaba de superar con éxito el escollo que significaba el torneo World Baseball Challenge, organizado en Canadá.
Sin triunfalismos decimos porque la calidad de los contrarios encontrados en la lid no da para creerse cosas; solamente valió la pena jugar contra el inspirado equipo de Taipei de China, que nos había ganado tres veces unos días atrás, y añadió otro triunfo en suelo canadiense.
Parece que la asignatura pendiente de los nuestros es el béisbol asiático, pues en 2008 nos ganó Surcorea en los Juegos Olímpicos de Beijing, en 2009 Japón en el Clásico Mundial, y ahora Taipei en cuatro de seis encuentros.
Sólo espero que la fiebre no llegue a China y el año entrante tengamos que lamentar derrotas ante los Tigres de Beijing o una escuadra con similar eufemística en el nombre.
Las palmas de manera individual para Yuliesky Gourriel, líder de los bateadores y entre los primeros en casi todos los indicadores, al parecer mucho más suelto en el sexto turno de la alineación.
Otro que llegaba con criterios en contra, Rudy Reyes, contribuyó grandemente al triunfo con ocho impulsadas y tres cuadrangulares (al fin aparecieron para nuestros bateadores en un evento internacional), y también sobresalieron Alfredo Despaigne y Yosvani Alarcón en el bateo de largo alcance.
Norberto ganó el juego decisivo.
Desde la lomita el gran protagonista fue Norberto González, quien lanzó casi todo el juego decisivo y cerró con promedio de 1.69 carreras limpias, e igualmente merece elogios la dirección de Eduardo Martín, que esta vez no dudó en hacer movimientos en su line up, aunque en el manejo del pitcheo tuvo algún que otro punto discutible.
En fin, vale la pena celebrar este título, aunque desgraciadamente la afición no pudo disfrutar de los partidos por radio o televisión. Por eso también he demorado en comentar sobre el certamen, porque pude ver encuentros de la Copa América y siempre prefiero hablar de lo que veo con mis propios ojos.
No obstante, parece mentira que tengamos que apelar a nuestros mejores jugadores para ganar una lid de poca monta, un torneo que sirvió exclusivamente para dar horas de vuelo a nuestros peloteros y limpiar un poco la pésima imagen dejada en Rótterdam.

martes, 19 de julio de 2011

¡Venezuela hace historia!

Por Lemay Padrón Oliveros

Honestamente, yo no esperaba que Venezuela estuviera en las semifinales de la Copa América de fútbol. Mi corazón lo pedía, pero mi mente se resistía. Enfrente tenía a una de las selecciones más sólidas de Suramérica, bien aceitada luego de varios años de jugar (y ganar) juntos, y con la invaluable experiencia de haber llegado a octavos de final en la Copa del Mundo de Suráfrica-2010.
Sin embargo, dentro de un terreno suceden las cosas que deben suceder, y casi siempre cuando un equipo se entrega al ciento por ciento se lleva la victoria. Ese fue el caso de la Vinotinto, que no creyó en rivales superiores y se ganó justamente su boleto entre los cuatro grandes de la región.
Nada fácil fue la tarea, porque en mi opinión el arbitraje estuvo todo el tiempo en su contra. Primero fue el inexistente offside sobre “Miku” Fedor, luego la doble falta de Gary Medel sobre el “Maestrito” González, la cual merecía la roja directa y no la pálida amarilla, y para rematar una falta por cobrarse al final de la primera mitad que nunca se cobró porque el imparcial decretó el entretiempo.
Pequeños detalles que pudieron haber impedido el completamiento de los cuartos de final más sorprendentes en la historia de las Copas América, en los cuales ganaron todos los equipos considerados más flojos y quedaron fuera a la vez las dos potencias de la región: Argentina y Brasil.
Nada de eso pudo con el empuje venezolano, el cual estuvo a punto de naufragar ante el vendaval chileno de la primera mitad del tiempo complementario, pero la diosa Fortuna, que también juega, tenía decidido que esa sería una noche vinotinto.
Tras encajar el empate fue como si golpearan a una fiera y todo el combinado morocho se lanzó al ataque hasta retomar la ventaja, que pudo ser incluso mayor con algo más de entendimiento en la delantera.
Antes de este duelo decíamos que Venezuela merecía todo el reconocimiento por su buena primera fase, pero la labor dominical dejó chiquito todo lo logrado en las jornadas previas.
El 17 de julio de 2011 quedará sin dudas en la historia del fútbol venezolano, como muestra indeleble de que ya la patria del Libertador Simón Bolívar no es la Cenicienta de Suramérica.

lunes, 18 de julio de 2011

Checho, se impone decir adiós

Por Lemay Padrón Oliveros

Mi querido y admirado Sergio Batista:
Esta no es la imagen que me gusta de la selección argentina.
Me enamoré del fútbol viéndote jugar a ti y a esa mágica selección argentina de Maradona en México-1986. Pero como técnico te has quedado por debajo de mis expectativas.
Primero fueron los amistosos contra Nigeria y Polonia, pero eso no me preocupó demasiado, preferí darte más tiempo para trabajar con ese enorme talento de la actual selección albiceleste.
Sin embargo, ya el apurado empate contra Bolivia en el debut de esta Copa América, el único punto que ganó ese equipo en el torneo, y luego otro abrazo con Colombia, me pusieron en ascuas. De nada sirvió la goleada ante Costa Rica, porque seguí insatisfecho.
La gota que colmó la copa evidentemente fue el encuentro con Uruguay, que fuiste incapaz de ganar pese a jugar con superioridad numérica más de 45 minutos, con todo el apoyo del público y hombres en la banca con calidad para seguir avanzando como Esteban Cambiasso o Ever Banegas. A propósito, ¿de dónde sacaste a Biglia, me vas a decir que porque jugó en el partido que le ganaron a Costa Rica es mejor? Por favor, si juega en la Liga belga y con Argentina alineó solamente dos veces en siete partidos del Mundial sub-20 de Holanda-2005.
Por todo eso te digo con toda tristeza que se impone tu adiós como DT de Argentina. Sí, porque si con el tiempo que tuviste para perfilar el equipo, los grandes jugadores que tenías y todo el apoyo desde las gradas, no fuiste capaz ni de colarte en semifinales de TU Copa, mi hermano, esto no es otra cosa que un sonoro fracaso.
¿Quién viene después? Por favor, nadie más de los campeones mundiales. Parece que los argentinos no están hechos para brillar dentro y fuera del campo; los más claros ejemplos son Pasarella, Maradona y tú mismo.
Si me preguntan a mí, digo que es el (enésimo) momento de Carlos Bianchi, o hasta de Ricardo Gareca, Gerardo Martino y Marcelo Bielsa, aunque ya tienen contratos, pero todo quedaría en un criterio muy personal.
No me tomes a mal, pero debes dar un paso al costado.
Firma: Un aficionado cubano
PD: Me sigues cayendo bien.

sábado, 16 de julio de 2011

Vino tinto y de lujo en Copa América

Por Lemay Padrón Oliveros

La selección venezolana de fútbol ha sido una de las grandes animadoras de la Copa América de fútbol de Argentina-2011, donde viene registrando su mejor actuación en muchos años.
Aunque también pasó a cuartos de final cuatro años atrás, evidentemente su condición de sede le benefició entonces, mientras que ahora no contaron con ese factor a su favor.
Además, en 2007 al ser sedes se colocaron en un grupo accesible (con Perú y Bolivia) y eso facilitó su acceso a la siguiente instancia, pero ahora compartían llave nada menos que con Brasil, Paraguay y Ecuador, equipos bastante superiores a ellos en cuanto a resultados en los últimos tiempos.
Si muchos se extrañaron con el empate a cero logrado ante el gigante suramericano en la primera fecha, segundo punto en toda la historia que le arrancan a los cinco veces campeones del mundo fuera de Venezuela, tras el conseguido en las pasadas eliminatorias, más aún lo fue el éxito 1-0 sobre los ecuatorianos (apenas el tercero para ellos en la historia de estas lides) y el épico empate a tres con los paraguayos, tras ir debajo 1-3 en el mismísimo minuto 90.
El domingo les toca jugar contra Chile, un equipo sólido y que ha demostrado los avances sostenidos desde que los entrenaba el argentino Marcelo Bielsa (2007-2010), y por eso es menester reconocerles la labor realizada antes que una posible y nada sorpresiva derrota pretenda empañar su buena actuación en tierras argentinas.
Las buenas presentaciones del “maestrito” César González, cerebro del mediocampo, el portero Renny Vega, el defensa Oswaldo Vizcarrondo, el volante Yohandry Orozco y el delantero José Salomón Rondón son la comidilla de la Copa.
Los progresos de la Vinotinto no son de ahora, en las tres últimas eliminatorias mundialistas suramericanas su actuación ha ido creciendo, y para Suráfrica-2010 el sueño estuvo bastante cerca.
Sólo lamento que con tanta colaboración deportiva entre Cuba y Venezuela no nos hayamos beneficiado en el único deporte en el cual saldríamos ganando totalmente con un encuentro bilateral, porque un solo amistoso (marzo de 2007) parece poco para dos naciones tan hermanadas.

jueves, 14 de julio de 2011

Las tribulaciones de un mohicano llamado Neymar

Por Lemay Padrón Oliveros

Neymar ya marcó en la Copa América.
Considerado por muchos el próximo Genio del fútbol mundial, el delantero brasileño Neymar da Silva tiene en estos momentos varias preocupaciones en su cabeza, adornada por un estrambótico pelado al estilo mohicano, para colmo pintado de rubio.
La primera de ellas debe despejarse en breve, y está relacionada con la actuación de Brasil en la presente Copa América, donde ha dejado bastante que desear con par de empates en sus dos primeros compromisos.
No obstante, confío en que la verdeamarelha retome el camino victorioso y, como en tantas ocasiones anteriores, vaya de menos a más.
El otro asunto capaz de quitarle el sueño al actual atacante del club Santos es su futuro futbolístico, pues sus allegados en Brasil y él mismo insisten en que todavía no quiere marcharse del gigante suramericano, y otros aseguran que está listo para dar el salto a Europa.
Si el debate interno fuera poco, a esto se suma la presión de un equipo tan poderoso como el Real Madrid, que no ha ocultado su deseo de incorporar YA al mediático ariete auriverde, reciente ganador de la Copa Libertadores con el plantel paulista.
El técnico madridista, el polémico José Mourinho, patalea desde la capital española clamando por la falta de un delantero, y por los apuros sufridos la pasada campaña en esa área dudo que los directivos le nieguen esa otra incorporación en la primera línea, a la cual aspira también el argentino Sergio Agüero, aunque no se descarta tampoco al togolés Emmanuel Adebayor, a préstamo en las filas blancas durante la pasada campaña.
Para Neymar seguirá siendo una cuestión de decidirse entre el romanticismo de buscar el título del Mundial de clubes con el Santos, único restante en sus vitrinas mientras siga jugando en Suramérica, o partir hacia España, con el consecuente glamour y la bonanza económica que esto significa.
Tanto él como quienes lo manejan han asegurado que nada se hablará hasta el fin de la Copa América, así que hasta entonces la almohada del futbolista seguirá siendo el receptáculo exclusivo de sus pensamientos sobre el futuro, además de intentar acomodar su peliparada cabellera.

miércoles, 13 de julio de 2011

El desafío del Challenge

Por Lemay Padrón Oliveros

Viento en popa y a toda vela marcha la selección cubana de béisbol en el torneo World Baseball Challenge (desafío) de Canadá transcurridos los cuatro primeros encuentros, sumando el tope con los anfitriones, el otro equipo aparentemente más fuerte.
Y así debe ser, porque aunque quienes pretenden tapar el sol con un dedo dicen y redicen que los demás también se preparan, los rivales que ha enfrentado Cuba este año son de nivel inferior, gústele a quien le guste.
La prueba más reciente la acaba de dar este plantel tras superar 6x3 al mismo equipo de Taipei de China que le ganó tres veces unos días atrás a la tropa de Roger Machado en la tristemente célebre edición 2011 del torneo Interpuertos de Rótterdam.
Es verdad, esta es la nómina de lujo de la isla caribeña, pero con los truenos que venían…
El béisbol cubano necesita ganar este torneo. Nunca pensé que me referiría así a una lid de poca monta como la canadiense, pero por desgracia hemos llegado a este punto y para evitar infartos masivos es imperativo que los pupilos del “emergente” Eduardo Martín pongan las cosas en su lugar.
Todavía no se ha bateado con soltura, apenas este lunes contra el débil conjunto chino, pero es que en Rótterdam nos dominaron hasta los lanzadores de Curazao y esa herida todavía supura.
De momento estimula también el hecho de que Martín le haya dado juego a nuevas figuras como el receptor tunero Yosvani Alarcón (sentó al mismísimo Ariel Pestano) y el jardinero cienfueguero Yoelvis Leyva, y más aún que estas lo hayan hecho bien.
Este resultado contra los Tigres de Beijing hizo olvidar un tanto el apretado debut 4x3 ante el modesto Toshiba japonés, aquel partido que estuvimos a punto de perder hasta el noveno inning.
Lo cierto es que de momento los seguidores del béisbol cubano nos sentimos más relajados, porque para sobresaltos ya están el fútbol, el baloncesto y otros deportes. Aquí preferimos respirar tranquilos.

martes, 12 de julio de 2011

Tuñas, el romperredes

Por Lemay Padrón Oliveros


Juventud Asturiana enfrentaba a Puentes Grandes en el marco de la Liga cubana de fútbol del año 1941, en el estadio habanero La Polar. A poco del final, el delantero Juan Tuñas prende un balón y le pega tan fuerte que rompe la red rival. Sin querer daba inicio a una leyenda.
En sus tiempos de gloria.
Desde entonces perdió su nombre y fue apodado "El romperredes", apelativo con el cual se le llama también genéricamente en varios rincones del mundo a los goleadores letales, esos que de cara a la puerta no ven otra cosa que los tres palos del arco.
Su momento de mayor importancia fue cuando integró el equipo de Cuba a la Copa Mundial de Francia-1938, única incursión mundialista de la mayor de las Antillas.
El aporte de Tuñas fue notable para que el seleccionado caribeño llegara a los cuartos de final después de eliminar a Rumanía en dos partidos, pues el primero había terminado en empate a tres y en ese entonces se celebraba un choque de desempate.
Algunas fuentes, incluidos testimonios del propio Tuñas, lo dan como autor de dos de las dianas en esa igualada, pero según los archivos oficiales de la Federación Internacional (FIFA), esas dos perforaciones las consiguió Héctor Socorro.
La histórica victoria, primera para una selección de región Norte, Centroamericana y del Caribe de fútbol (Concacaf) en las Copas Mundiales en suelo europeo, tuvo lugar el 9 de junio de 1938 en la ciudad gala de Toulouse.
En definitiva los cubanos fueron eliminados por Suecia (8-0) en los cuartos de final en la localidad de Antibes el 12 de junio de 1938, pero aquel triunfo previo permanece con tinta indeleble en la historia del balompié antillano. Tres temporadas después del Mundial de Francia-1938, Tuñas se mudó a México y jugó como profesional en el Real Club España, con el cual ganó dos títulos de Liga durante las temporadas de 1941-42 y 1944-45, en el primer caso luego de incorporarse al plantel cuando iba último. En la nación de los aztecas dejó de existir El romperredes en abril pasado, luego de ser internado en un hospital de la capital mexicana por una neumonía debido a su avanzada edad, dejando a su paso seis hijos y numerosos nietos.
Al abandonar este mundo el cubano, de 93 años, era el último jugador vivo de la Concacaf en participar en las primeras tres Copas del Mundo y probablemente también el mundialista más longevo del planeta.


VENERADO EN SU PAÍS NATAL

Pese a vivir la mayor parte de su existencia adulta en México, Tuñas jamás renunció a la ciudadanía cubana, y ese gesto de arraigo fue premiado por autoridades y fanáticos de la mayor de las Antillas, donde nació el 17 de julio de 1917.
En 1943 fue distinguido como el mejor deportista cubano en el extranjero y en 1959, meses después del triunfo de la Revolución liderada por Fidel Castro, regresó a La Habana para jugar, ya retirado y con 42 años, un partido amistoso a favor de la Ley de Reforma Agraria.
Más de 40 años tardó "El romperredes" en regresar a su suelo patrio, pero lo hizo por la puerta grande en 2002, cuando fue la figura central de los festejos por el aniversario de la introducción del fútbol en Cuba, y regresó en 2005, al ser distinguido como Gloria del Deporte Cubano.
Este reconocimiento es un gran honor, pues lo recibo en mi país natal, el cual posee enormes potencialidades futbolísticas y del cual espero clasifique para jugar en otra Copa del Mundo, dijo el ex atacante en aquella ocasión.
No podían olvidarse las actuaciones de Tuñas con la casaca nacional, con la cual debutó con apenas 16 años, y especialmente su actuación en la cita del orbe de 1938, cuando alineó como titular en los tres partidos.
Según el propio futbolista, la prensa local los daba de favoritos en el duelo contra Suecia, pero el mal estado del terreno les jugó una mala pasada.
Sucedió algo que no esperábamos: llovió y el campo se inundó. No estábamos acostumbrados a eso, nos resbalamos una y otra vez, y terminamos perdiendo 8-0, recordó el pasado año en una entrevista para el sitio web de la FIFA.
A nivel doméstico dio sus primeros pasos como delantero en el club Centro Gallego en la década del 1930, con el cual se coronó en tres ocasiones, y el Juventud Asturiana, al que llevó al título en 1941, año en el cual decidió mudarse a México para brillar en esa nación.

domingo, 10 de julio de 2011

La eliminación en la final de la Liga no es para preocuparse

Por Lemay Padrón Oliveros

La eliminación de Cuba en la final de la Liga Mundial de voleibol era tan esperada como la noche al final de cada día.
Muy pocos seguramente tenían esperanzas de que la inexperta formación caribeña lograra incluirse en las semifinales, como había hecho en las dos ediciones previas con efectivos mucho más curtidos, y por eso lo más probable es que no haya desencanto entre los aficionados al deporte de la malla alta.
Es verdad que se pudo hacer más: el partido con el multicampeón Brasil se tuvo en el bolsillo, y con los titulares olímpicos estadounidenses se batieron de tú por tú, pero no pudo ser. Los choques ante este tipo de rivales se deciden por detalles muchas veces limados hasta la saciedad luego de años de compenetración entre los regulares de cada equipo, y eso le falta a Cuba.
De todas maneras, el hecho de llegar a cinco sets con estos dos contrarios es otra muestra del potencial de la escuadra caribeña, que logró una impensada clasificación a la ronda decisiva luego de afrontar disímiles problemas en la pretemporada.
Además de mejorar la preparación es necesario rescatar a nuestros jóvenes talentos, porque sería un gran error pasar la página y cerrar la puerta a quienes por una razón u otra dieron un paso al costado en la recién concluida Liga. Motivos aparte, no creo que existan razones con peso suficiente como para desterrar a quienes hoy no forman parte del plantel y permanecen en la Isla.
Estamos a unos 12 meses de los Juegos Olímpicos de Londres-2012 y la experiencia de un solo voleibolista pudiera ser crucial para definir incluso la clasificación a esa cita estival. Por supuesto que de contar con todos estuviéramos pensando en una medalla esperada desde Barcelona-1992.
Durante toda la Liga, pero especialmente en la final, se vio que todos los planteles acuden con frecuencia a su banca para resolver problemas puntuales, mientras Cuba debía depender casi exclusivamente de sus seis regulares.
Nos quedan aún unos meses para comenzar el camino que nos lleve a la capital del Reino Unido, ojalá se conjuguen todos los factores necesarios para que el voleibol masculino de Cuba pueda completar este ciclo como se merece.

viernes, 8 de julio de 2011

Chicago-1959, por primera vez en Estados Unidos

Por Lemay Padrón Oliveros

Los III Juegos Panamericanos de Chicago-1959 se inauguraron el 27 de agosto en la capital del estado de Illinois, en la primera vez que la cita continental se realizaba en Estados Unidos.
Por esa razón los organizadores decidieron conformar una buena delegación, y para eso utilizaron el mismo sistema con el cual conforman sus equipos olímpicos, mediante pruebas eliminatorias que otorgaban plazas a los tres primeros lugares.
Los Juegos habían sido programados inicialmente en Cleveland, pero debido a una decisión del Congreso estadounidense de recortar el presupuesto económico, la principal ciudad de Ohio se vio forzada a retirar la sede.
Chicago entonces asumió la responsabilidad, y el día señalado estuvieron presentes en el Soldier Field representantes de los dos mil 263 atletas que participaron en los 18 deportes convocados, recibidos por una multitud calculada en 40 mil personas.
Como deportes debutaron el yatismo y la gimnasia artística para damas, y como países Bermudas y Guyana.
Como era de esperarse, Estados Unidos fue el amplio dominador, con 115 medallas de oro, 69 de plata y 52 de bronce, al ganar en atletismo, baloncesto, ecuestre, esgrima, gimnasia, halterofilia, natación, voleibol, vela, pentatlón, remo, tiro, lucha y polo acuático.
El predominio fue tal que la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA) tomó la decisión de que en lo adelante cada país podía enviar solamente a dos competidores por especialidad, para evitar las barridas.
Detrás se ubicó Argentina (9-19-11), que festejó grandemente la tercera coronación consecutiva en fútbol, y el cetro de Oswaldo Suárez en 10 mil metros planos, además de los triunfos de sus ciclistas y boxeadores.
Brasil mejoró con respecto a sus actuaciones precedentes, quizás pensando en la sede de Sao Paolo-1963, y ocupó la tercera plaza, al finalizar con cosecha de 22 galardones (8-8-6), mientras que Cuba quedaba octava (2-4-4), un escaño por delante de México-1955.
La referencia a Cuba es necesaria porque apenas unos meses antes había triunfado su Revolución y no tuvo tiempo de preparar adecuadamente a su comitiva, pero el fruto de los cambios comenzaría a apreciarse en las venideras citas continentales.
En sentido general, de las 24 naciones asistentes al torneo, 19 de ellas pudieron subir al podio al menos una vez, incluidas pequeñas delegaciones como Haití (0-1-0), la debutante Guyana (0-0-3) y Antillas Holandesas (0-0-1).

LOS DESTACADOS

Da Silva fue también dos veces campeón olímpico.
A la hora de hablar de destacados se debe mencionar en primer orden al triplista brasileño Adhemar Ferreira Da Silva, quien alcanzó aquí la condición de leyenda, gracias a la conquista de su tercer título consecutivo en Juegos Panamericanos.
Tras celebrar sus conquistas en Buenos Aires-1951 (15.19 metros) y México-1955 (16.56), Da Silva se estiró 15.90 para eslabonar su tercer cetro en sucesión, una hazaña que debió esperar 40 años para verse igualada por el cubano Yoelbis Quesada en Winnipeg-1999.
El canguro auriverde fue uno de los pocos que logró arrebatarle un cetro a la fortísima escuadra atlética anfitriona, en cuyas filas había figuras como el cuatro veces campeón olímpico Al Oerter y Wilma Rudolph, quien brillaría al año siguiente en Roma-1960.
Otros que desafiaron el dominio estadounidense en el Deporte Rey fueron la jabalinista chilena Marlene Ahrens, el velocista jamaicano George Kerr, el mencionado fondista Oswaldo Suárez, la vallista cubana Bertha Díaz y el relevo 4x400 de Jamaica.
La espigada y rubia Ahrens se impuso sin problemas, convertida en una gloria del deporte de su país, pues era y sigue siendo la única mujer chilena en subir a un podio olímpico, al ser segunda en la cita estival de Melbourne-1956.
Por su parte, el argentino Suárez hizo una nueva demostración de su gran categoría como fondista al revalidar el título panamericano de los 10 mil y obtener la segunda plaza en los cinco mil, que había dominado también en México-1955.
Su racha de triunfos continuó cuatro años después en los Juegos de Sao Paulo-1963, donde ganó el oro en la distancia más corta y la plata en la más larga, para cerrar su brillante actuación panamericana con cuatro oros y tres platas.
El estadounidense Ray Norton fue triple campeón con victorias en 100, 200 y 4x100, y el único 1-2-3 que no fue para los organizadores ocurrió en los 400 metros lisos, cuyo podio fue copado por tres jamaicanos: George Kerr, Basil Ince y Melville Spence, por ese orden.
Fuera del Deporte Rey, vale destacar al tenista mexicano Gustavo Palafox, con dos cetros, y las cinco coronaciones de la nadadora estadounidense Christina Von Saltza, quien al año siguiente en Roma se adjudicó tres oros.
Uno de los mayores reveses de los organizadores fue en el béisbol, donde Venezuela alcanzó su único título en estas lides.
El máximo ganador de los Juegos fue el gimnasta norteño John Beckner, quien al igual que cuatro años antes fue el gran triunfador con cuatro títulos, aunque en la prueba especial de clavados lo volvió a superar el mexicano Francisco Álvarez.
Asimismo, el cubano Juan Torres fue el único capaz de impedir la barrida de los locales en el levantamiento de pesas, al imponerse en la división de 67 kilogramos.
Los III Panamericanos cerraron con éxito el 7 de septiembre de 1959, y mostraron la madurez del movimiento continental, que seguiría fortificándose en las ediciones siguientes.

jueves, 7 de julio de 2011

Eurobasket (f) 2011: Rusia obtiene boleto a Londres-2012

Por Lemay Padrón Oliveros


Mostrando una garra de altura, el seleccionado femenino de Rusia alcanzó su boleto a los Juegos Olímpicos de Londres-2012 al derrotar a Turquía en la final del Campeonato Europeo femenino de baloncesto, celebrado en Polonia.
Danilochkina fue la jugadora más valiosa.
Guiadas con maestría por su organizadora, Elena Danilochkina, las rusas supieron reponerse de dos derrotas en la fase inicial (contra Lituania 64-76 y Belarús 51-62) hasta eslabonar seis éxitos consecutivos y coronarse en el certamen.
La defensa de 25 años mostró madurez en la conducción del juego, y además tiró para un 50 porciento de efectividad y aportó una media de 13.9 puntos por partido, para asegurar la tercera coronación de las suyas en ocho años, siempre de manera alterna: una vez campeón y otra subcampeón.
Para Turquía quedó el consuelo de firmar el mejor resultado de su historia, pues hasta entonces solamente registraba el octavo puesto cuando fueron sedes en 2005, pero en tierras polacas supieron ganar los juegos decisivos hasta colarse inesperadamente en la final.
Francia también merece destaque con su tercer lugar, porque en los duelos decisivos debió prescindir de su principal estrella, la pívot Emmeline Ndongue, de ascendencia camerunesa, quien las había guiado al trono en Lituania-2009 y ahora sufrió una fractura del tendón de Aquiles.
Las grandes decepciones fueron España, Belarús y Polonia, que llegaban a este Eurobasket con aspiraciones de escalar el podio y ni siquiera podrán soñar con incluirse en el próximo torneo bajo los cinco aros.
Individualmente además de Danilochkina, la cara de la nueva generación rusa, brillaron otros talentos jóvenes, como la checa Katerina Elhotova, la letona Elina Bankina y la montenegrina Ana Turcinovic.
En el quinteto ideal fue escogida la también rusa María Stepanova como centro junto a la turca Nevriye Yilmaz, la alera checa Eva Viteckova, y Danilochkina y la croata Sandra Mandir como bases.

TODAVÍA HAY ESPERANZAS DE CARA A LONDRES

Los países ocupantes de los puestos del dos al cinco (Turquía, Francia, República Checa y Croacia, por ese orden), tendrán derecho a participar en el preolímpico mundial del próximo año, que otorgará los últimos cupos estivales.
La lid, todavía sin sede ni fecha definida, reunirá además a tres equipos de las Américas, dos de Asia, dos de África y uno de Oceanía, en pos de las cinco plazas que completarán las 12 olímpicas, pues Gran Bretaña está asegurada como sede y Estados Unidos como titular del mundo de 2010.
Previamente habrán garantizado su presencia en la capital británica las campeonas de cada zona geográfica, entre las cuales Rusia es la primera en lograrlo.
Colombia, Mali, China y Australia a finales de septiembre definirán los clasificados a Londres y el venidero preolímpico de América, África, Asia y Oceanía, respectivamente.

miércoles, 6 de julio de 2011

El problema no está en Holanda, sino en Cuba

Por Lemay Padrón Oliveros

Cuba llegó a la final de puro milagro.
Dice un viejo refrán que es más fácil ver la paja en el ojo ajeno, y por eso quiero referirme a lo sucedido en el torneo interpuertos de béisbol de Rótterdam, porque seguramente las mayores críticas irán dirigidas a los protagonistas.
No es que les falte responsabilidad, por supuesto que la tienen, empezando por el manager Roger Machado, quien echó por tierra cualquier especialización o dosificación de pitcheo y tampoco aplicó las variantes tácticas adecuadas a cada momento, y terminando por el último de los miembros de la escuadra, hayan estado bien o mal.
Algunos finalizaron con buenos promedios ofensivos, pero eso no quiere decir que hayan sido oportunos y conectado a la hora más necesaria, aunque no niego que se hayan ganado el derecho de integrar el equipo Cuba a otro torneo de mayor nivel. Salvaré con absoluta limpieza solamente al lanzador Yadier Pedroso, aunque algunos consideren que soy demasiado exigente.
Pero entrando en materia, lo que pretendía era no centrar el análisis en lo sucedido en Holanda, sino en lo que sucede en Cuba con nuestro campeonato elite. Evidentemente una cosa es lo que vemos aquí y otra muy diferente el panorama encontrado fuera. Ya no fueron las potencias del béisbol las que nos dominaron sino conjuntos con bastante poco prestigio en esta disciplina.
Por eso insisto en que en nuestra Serie Nacional está la respuesta, y lo estará cada vez más porque habrá menos torneos internacionales. Por ende, pocos fogueos serán tan útiles como los 90 juegos de nuestro certamen doméstico, si es que allí se concentra lo mejor de nuestro béisbol.
Llevamos años siguiendo el esquema de la representatividad territorial y eso es plausible, porque cada provincia merece disfrutar del espectáculo mayor del deporte cubano y verse representada en el mismo, pero no estamos hablando de deporte participativo. Esto es deporte de elite, y como tal allí deben estar lo mejores. Si eso implica que en vez de provincias se confeccionen los planteles respondiendo a territorios más amplios, pues que así sea sin miedo alguno. A la postre es más económico hacer una serie con ocho o 10 equipos y otros tantos en una especie de Liga de Desarrollo que reunir 16 o 18 sin la calidad necesaria y jugando la Liga dos meses antes con similar cantidad de novenas.
De lo contrario es mejor acostumbrarnos a la idea de que no nos importa competir (y perder) internacionalmente.

martes, 5 de julio de 2011

Hazaña del voleibol cubano

Por Lemay Padrón Oliveros

De nada menos que de hazaña debemos evaluar lo conseguido por el poco experimentado equipo cubano de voleibol masculino, que acaba de garantizar su presencia en la final de la Liga Mundial.
Antes del pitazo inicial muy pocos apostaban por la presencia de los cubanos en la ronda decisiva, y razón no les faltaba.
Al hecho conocido desde meses atrás de que jugarían todos sus partidos como visitantes por la falta de climatización de la Ciudad Deportiva, se sumó la ausencia de importantes figuras, algunas probablemente desmotivadas por esa misma situación.
Bell brilló como nunca.
Además, arrancaron con una derrota en Surcorea que los llevó a remolque durante casi toda la fase clasificatoria, al punto de que estuvieron obligados a ganar el último partido para colocarse entre los ocho finalistas.
No obstante, nada de esto fue capaz de frenar a nuestros chicos, que estuvieron cerca de siete meses sin enfrentar un partido de nivel internacional, y debieron improvisar prácticamente una alineación titular tras la salida de tres de sus regulares.
La diosa Fortuna parecía oponérseles, pero en definitiva nada los frenó, y buena parte de ese éxito recae en los hombros del veterano Henry Bell, quien luego de años como suplente tuvo su oportunidad y brilló a tal punto que finalizó como el mejor atacador (en porciento de efectividad) y tercer máximo anotador de la Liga.
Junto a Wilfredo León fueron los dos referentes ofensivos del plantel, pero es justo resaltar también la notable mejoría del líbero Keiber Gutiérrez tanto en el recibo como en la defensa, y los desempeños certeros de los centrales Osmany Camejo e Isbel Mesa.
Ni hablar de la labor del técnico Orlando Samuels, impávido como una estatua pese a todos los embates sufridos en la pretemporada y durante la propia Liga, hasta sacar el máximo a cada uno de estos muchachos.
De la final todavía no es momento de hablar, vale la pena festejar en primer lugar esta nueva hazaña del voleibol cubano, predestinado a la inmortalidad por la calidad y entrega de sus practicantes.

lunes, 4 de julio de 2011

Los puños de hierro de Stevenson

Por Lemay Padrón Oliveros

Para muchos es el más grande boxeador que ha visto el mundo aficionado, y entre los mejores si a cualquier boxeo se refiere, pero lo cierto es que la historia de los Juegos Panamericanos estaría incompleta sin la mención del cubano Teófilo Stevenson Lawrence.
El hombre que rompió el predominio estadounidense en los pesos pesados rechazó en innumerables ocasiones propuestas para saltar al profesionalismo y llenarse los bolsillos de dinero, pero sobre los cuadriláteros lo ganó casi todo.
Desde su debut internacional en los Juegos Panamericanos de Cali-1971 hasta su despedida en el Mundial de Reno-1986, fue siempre el más seguido por los medios de difusión, y el más respetado encima del ring, merced a su mortífera pegada.
Precisamente en Juegos continentales tiene una linda historia el nacido el 29 de marzo de 1952 en el poblado del central azucarero Delicias, hoy perteneciente al municipio de Puerto Padre, en la oriental provincia cubana de Las Tunas.
En la cita colombiana perdió en semifinales con el estadounidense Duanne Bobick, el mismo rival que lo lanzó al estrellato al año siguiente en los Juegos Olímpicos de Munich, pero esa es otra historia.
Cuatro años más tarde ya era toda una estrella y sin mucha oposición conquistó el cetro máximo en México-1975, al igual que lo hizo en San Juan-1979.
A diferencia de algunas figuras de su generación y de casi todas las que vinieron después, Stevenson tuvo en su propio país a un rival de gran nivel, el pinareño Ángel Milián, con quien sostuvo varias peleas muy recordadas por la entrega y la valentía de ambos sobre el encerado.
En un par de ocasiones se decidió otorgar dos medallas de oro en la categoría superpesada para que estos dos demoledores de huesos no cruzaran guantes, con el consecuente perjuicio para uno de ellos, o ambos, y pérdida en definitiva para el boxeo cubano.
Por eso también faltan más medallas regionales en el palmarés de Stevenson, ya que se le dio también oportunidades internacionales al gigante pinareño.
Sin embargo, no fue con Milián con quien Stevenson perdió más de una vez, sino con el desconocido Igor Visotsky, un púgil ruso de escasos recursos técnicos, pero de resistencia a toda prueba y también fuerte golpeo.
Dos veces se vieron las caras en el encerado y en ambas ocasiones triunfó el europeo, único en el mundo que logró tal hazaña sin sufrir el desquite del cubano: en el Córdova Cardín de 1973, y tres años más tarde en un torneo internacional en Minsk, hoy Belarús.
No obstante, Visotsky no llegó a ser nunca el número uno en su país, la entonces Unión Soviética, donde pululaban los boxeadores de calidad en las divisiones grandes, y por eso su mayor orgullo fue y será haber derrotado en par de ocasiones a Stevenson.
Pasado el tiempo, en 2006, Visotsky confesó en una entrevista que el cubano era como un hermano para él y nunca había visto púgil similar: "Todavía creo hoy que es el mayor boxeador amateur de todos los tiempos y todas las civilizaciones", declaró.

TRES OROS OLÍMPICOS

Medallas de oro en tres Juegos Olímpicos lo convierten en el peso completo más extraordinario del boxeo amateur y en uno de los más grandes en cualquier división de todos los tiempos.
La primera llegó en Munich-1972, cuando se reencontró con Bobick, quien era considerado la Gran Esperanza Blanca por la prensa norteamericana, según la cual se encargaría de opacar el reinado del legendario Joe Louis o del mismo Mohamed Alí.
Sin embargo, sobre el cuadrilátero bávaro chocó con la potente diestra de Stevenson, quien lo lanzó a la lona para toda su vida, ya que nunca más pudo brillar.
De ahí en adelante, el tunero conquistó uno tras otro los títulos mundiales dirimidos de La Habana-1974, Belgrado-1978 y Reno-1986, los dos primeros en la categoría de más de 81 kilogramos y el tercero en más de 91.
En ese mismo orden llegaron sus coronaciones olímpicas en Munich-1972, Montreal-1976 y Moscú-1980, y además reinó en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Santo Domingo-1974 y La Habana-1982.
En total fue 11 veces campeón nacional y una vez subcampeón, y cosechó además nueve medallas de oro en el tradicional torneo internacional Giraldo Córdova Cardín in memóriam, considerado en su época tan fuerte como un Mundial.
Fue solidario con la decisión cubana de no asistir a los Juegos Olímpicos en Los Ángeles-1984, pero de lo contrario habría tenido la posibilidad real de lograr cuatro títulos en citas cuatrienales del músculo, y no dudamos que los hubiera alcanzado.
Stevenson fue tentado a firmar como boxeador profesional y estuvo a punto de concretarse una pelea suya contra el legendario Mohamed Alí, pactada por cinco millones de dólares en premios, pero finalmente el combate nunca se llegó a efectuar.
Nunca resultó noqueado. Su pegada era demoledora y en más de una ocasión solo con el jab puso fuera de combate a su rival de turno quien llegó a conquistar todos los títulos que confiera la Asociación Internacional de Boxeo Amateur (AIBA).
Entre estos premios se incluyen la Copa Val Balker, concedida el mejor púgil del planeta, hasta el trofeo Fair Play por su caballerosidad sobre el encerado.
Colgó los guantes en plenitud de facultades, pero tras poco más de medio siglo vividos y 40 años dedicados de una forma u otra al boxeo este gigante de cuerpo y alma gozó del cariño que su pueblo siempre le profesó.
Además, era invitado con regularidad a torneos de prestigio en disímiles rincones del planeta, y pueden dar por sentado que no era por su condición de vicepresidente de la Federación cubana de boxeo, sino por el prestigio ganado con sus puños de hierro. Falleció sorpresivamente el 11 de junio de 2012, de una afección cardiaca, pocos días después de cumplir 60 años.

sábado, 2 de julio de 2011

La deuda de Messi

Por Lemay Padrón Oliveros

La Copa América acaba de arrancar y nuevamente Lionel Messi tiene ante sí un reto: el de complacer a los aficionados de su país, que esperan por un título de Argentina desde hace casi 20 años, y en especial quieren verlo a él brillar con la casaca albiceleste en un torneo importante.

Con el Barcelona lo ha ganado todo, pero cuando se enfunda la elástica celeste y blanca las cosas no le salen igual al ídolo de Rosario, que nunca jugó seis partidos seguidos en Argentina, porque desde pequeño está en la cantera del Barca y no conoce otro club, y con la selección disputó solamente choques amistosos y de clasificación mundialista, de manera esporádica según el calendario.
El fútbol es un deporte de equipo, y por mucho que uno brille, si el resto no le acompaña el plantel está condenado, pero esta Argentina no es un circo, aquí hay talento suficiente como para que “El Mesías” rinda al máximo.
Con mucho menos Diego Armando Maradona la sacó campeona en México-1986 y la llevó a la final de Italia-1990, y de nuevo sale el debate entre los dos jugadores, inclinado totalmente por la ex estrella del Nápoles hasta tanto Lio no logre algo grande con Argentina.
De que es hoy el mejor jugador del mundo, eso muy pocos lo dudan, pero cómo hacerlo ganar, porque en el fondo eso es lo que vale. Cuando Messi no anota y el Barca gana nadie lo critica, pero aunque él juegue bien si cae Argentina lo crucificarán seguramente.
Hasta ahora cada vez que al pequeño genio se le marca un reto, lo supera, y esa es la gran esperanza de los anfitriones en la Copa América, donde el técnico Sergio Batista debe encontrar el acompañamiento ideal.
En su país natal no quieren seguir notando diferencias entre el volante que juega en la Liga española y el que ven con la selección nacional, porque en esencia es el mismo: el de exquisita técnica, que le hace burlar rivales constantemente, disparar con tino y encontrar al compañero mejor posicionado.
Por eso tiene un puesto asegurado en la historia del fútbol, suceda lo que suceda, pero si volvemos a la pregunta clave: ¿Está Messi en deuda? Yo debo decir que sí con absoluta sinceridad, y seguramente del Río La Plata hacia abajo muchos estarán de acuerdo.

viernes, 1 de julio de 2011

Fortún, el primer héroe cubano en Panamericanos

Por Lemay Padrón Oliveros

Cuando se dice el nombre de Rafael Fortún a la mente de todos llega su momento cumbre, aquel de marzo de 1951, cuando se celebraban los I Juegos Panamericanos de Buenos Aires y él conquistó las medallas de oro en las pruebas de 100 y 200 metros planos.
Entonces, el velocista de la oriental provincia cubana de Camagüey, se convertía en el primer doble titular continental de la Antilla mayor, condición que mantuvo en exclusiva hasta bien entrada la década de los 70.
Pero en esta ocasión aprovecharemos para refrescar otro hecho interesante, y que sí lo hace totalmente exclusivo, pues se mantiene como el único velocista capaz de ganar la prueba de los 100 metros planos en tres Juegos Centroamericanos y del Caribe: Barranquilla-1946, Guatemala-1950 y México-1954. Casualmente la hazaña también fue concretada en marzo, sin dudas el mes de la suerte para el bólido cubano.
En 1946 obtuvo las preseas doradas en los 100 (10 segundos y cuatro décimas) y 200 metros lisos (21.6) y la de plata en el relevo 4x100 (43.1). En la primera prueba superó al jamaicano Herbert McKinley (10.7), en la segunda al panameño Lloyd La Beach (21.7) y al propio McKinley (21.7), y en la posta -junto a Jesús Farrés, Pedro Castillo y Eligio Barbería- sólo entraron detrás de los panameños.
En la lid regional celebrada en la ciudad de Guatemala en 1950, igualmente repite su actuación en el hectómetro (10.3), aunque en esta ocasión es segundo en 200 (21.2) y primero en la posta (41.5). Detrás de él en la primera competencia entraron McKinley (10.4) y La Beach (10.5), y el de Jamaica, ganador también de los 400, lo superó en el medio óvalo con registro de 20.9. En tanto, la cuarteta completada por Farrés, Raúl Mazorra y Dioscórides Wilson adelantó tanto a la jamaicana como a la panameña.
El 4 de marzo de 1954, hizo 10 segundos y cinco décimas a los 34 años, edad a la que muchos especialistas de la velocidad dicen adiós a las lides del músculo. Además, entró segundo como integrante de la cuarteta cubana. Para esta ocasión su escolta en la modalidad más rápida fue el jamaicano Leslie Lang (10.6), ganador también de los 200 y líder de la posta triunfante, por delante de Fortún, Israel Mestre, Mazorra y Manuel Peñalver.
Que conste que el nivel de sus contrarios era elevado, pues entre sus víctimas más renombradas se encontraba el jamaicano McKinley, subcampeón olímpico en la vuelta al óvalo de Londres-1948 y en el hectómetro en Helsinki-1952, y La Beach, medallista de bronce en la prueba reina de la cita londinense.
Durante su vida sufrió la pobreza en carne propia, pues sólo gracias a la realización de rifas y colectas públicas pudo competir en Juegos Olímpicos, aunque sus resultados en Londres-1948 y Helsinki-1952 quedaron lejos de su real calidad en esa época.
Tratando de ser absolutamente certeros, no entró a la final de la prueba reina porque entonces existían pocas carrileras y él ocupó la séptima posición, pero comenzó a despejar el camino que seguirían más tarde Enrique Figuerola, Pablo Montes y Silvio Leonard, hasta que la especialidad cayó en una total anemia en los últimos 20 años.

RAPIDA MIRADA A LA VIDA DE RAFAEL FORTUN

Nació el 5 de agosto de 1919, y por su extracción humilde desde muy joven debió estudiar y trabajar a la vez, en su caso laboraba en una imprenta y adquiría conocimientos en el Instituto de Segunda Enseñanza de su ciudad natal.
Se inició en competencias deportivas en los primeros años de la década de 1930, cuando jugaba béisbol y exhibió dotes de buen fildeador, y por supuesto, también corría las bases como un rayo, pero en alguna ocasión confesó que su verdadero amor era el salto alto.
Sus condiciones para practicar carreras de velocidad y el salto de longitud le permitieron ser captado para perfeccionar sus virtudes naturales, y eso le hizo un poco más llevadera la vida, aunque no podemos olvidar que tras coronarse en Buenos Aires fue despedido por ausentarse del trabajo durante esos días. Contrastes de entonces.
Contrariado por el suceso tomó la decisión de irse a vivir a San Juan, Puerto Rico, pero en su Camagüey natal se hizo una gran colecta pública para comprarle una casa a sus padres y fue tan grande la connotación que las autoridades no solo le restituyeron en Obras Públicas, sino que decidieron nombrarlo inspector, con aumento salarial incluido.
Al triunfo revolucionario cesaron sus penurias, y por años se dedicó a la captación de talentos en su provincia natal.
El 22 de junio de 1982 dejó de existir en Camagüey, cuando había sido seleccionado para encender la antorcha de los Juegos Centrocaribes de La Habana, pero dos décadas después no se olvidan sus hazañas, por las cuales resultó elegido entre los 100 mejores deportistas cubanos del Siglo XX y una Sala Polivalente de su provincia natal lleva su nombre.
Además, fue exaltado al Salón de la Fama  de la Confederación Centroamericana y del Caribe de Atletismo.